El presidente de la Asociación Agua para La Palma, Pedro Monzón, asegura que las obras hidráulicas llevadas a cabo tras la erupción volcánica en el Valle de Aridane, «no resuelven los problemas de base y solo sirven para prolongar un sistema caduco y de especulación con el agua», frente a soluciones «infinitamente más económicas». Sobre la tubería por la nueva fajana lo tiene claro: «Es un ejemplo más de cómo intereses particulares prevalecen sobre los generales». De ahí que dé un margen de confianza aún al nuevo gobierno del Cabildo palmero, aunque aún, apunta Monzón, no haya dado muestras de asumir el cambio de política que defiende la asociación «para abaratar el coste del agua hasta un 90%».
Este cambio consiste, entre otras medidas, en obras públicas como salvar de la ruina y retomar el aprovechamiento del Túnel de Trasvase y colocar tranques en las galerías, descartando la construcción de caras e insostenibles desaladoras de agua marina. «Necesitamos gobiernos valientes que no se dejen influir por los poderes fácticos del agua que quieren que todo siga igual para abocarnos a la decadencia total», propugna.
«En La Palma debemos liberarnos de una red de intereses que solo nos permite sobrevivir»
Monzón sostiene que las propuestas de la asociación cuentan con un apoyo masivo en el sector agrario de la isla. Sin embargo, revela, es un respaldo que no se muestra en público por «el clima de miedo» a perder subvenciones públicas o a tener problemas para conseguir agua de riego.
«En La Palma estamos atrapados en una red de intereses particulares que solo nos permite sobrevivir, pero no expandir nuestra economía, y hasta que nos libremos de esa red no dejaremos de ser una isla subvencionada para ser una isla de oportunidades», remacha.
Y lanza un guante al nuevo gobierno del Cabildo palmero, al que da un margen de confianza, aunque aún no haya dado muestras de querer asumir los planteamientos de la asociación.
Eso sí, previene de que si la isla continúa con la misma política de esta institución en las últimas décadas, el resultado será igual que hasta ahora, en perjuicio de la reactivación económica y de un sector agrario estrangulado por el altos costes de producción, incluidos los del agua.
«La tubería por la fajana, otro ejemplo de intereses particulares que prevalecen sobre el general»
En relación con la tubería construida por el Cabildo a través de la nueva fajana creada por el volcán de Tajogaite, el presidente de Agua para La Palma la conceptúa como «un ejemplo más de que los intereses privados prevalecieron sobre los generales».
Y ello pese a que «muchísimos afectados de la zona de exclusión y de Las Hoyas-El Remo pidieron por activa y por pasiva que esa tubería se instalara de La Laguna a Las Norias para que desde la Charca de los Cuatro caminos se pudiera regar en el futuro toda la parte sepultada y toda la que quedó aislada».
«Pensamos que se hizo con otro trazado para restablecer instalaciones antiguas que sirven a unos intereses; es triste pero no encontramos otra explicación», subraya Monzón, quien recuerda que esta obra está denunciada por la Dirección General de la Costa debido a que no contó con su visto bueno previo para ocupar el dominio público marítimo terrestre; lo que podría acarrear una sanción de 1,5 millones al Cabildo.
EL VÍDEO COMPLETO DE LA ENTREVISTA:
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